¿𝗧𝗲𝗻𝗴𝗼 𝗾𝘂𝗲 𝗮𝗽𝗿𝗲𝗻𝗱𝗲𝗿 𝗮 𝗯𝘂𝘀𝗰𝗮𝗿 𝘁𝗿𝗮𝗯𝗮𝗷𝗼?🤯

 

Imágenes Freepik

🤯

No falla, esta es la cara que le sigue a mi afirmación: Tienes que aprender a buscar trabajo’.

Y estas las respuestas más comunes: ‘Yo ya sé buscar trabajo, nadie me ha buscado el trabajo antes’, ‘No estoy pa perder el tiempo’, ‘lo que necesito es currar’, ‘yo aquí no vengo a aprender si no a buscar un sueldo’.

Mira que todos sabemos que la vida es un proceso de aprendizaje constante, pero es verdad que mientras más años cumplimos se nos hace más cuesta arriba aprender en general, da igual que sea inglés o cómo montar un mueble del IKEA, nos lo ponemos difícil a nosotros mismos, perdemos la curiosidad y nos cuesta mucho más trabajo afrontar nuevos aprendizajes, aunque estos sean necesarios, como este que te propongo.

Cuando perdí mi trabajo la primera vez, allá por 2014, rápidamente me di cuenta de que o me ponía las pilas y me olvidaba de todo lo que ya sabía del tema y de todo lo que había hecho antes o me iba a comer un colín. Sí o sí me tocaba aprender de nuevo.

Es como cuando te pasas quince años con tu novio, te casas con él y estás casada otros tantos años y luego te separas y pasado un tiempo, te apetece empezar a conocer a otra gente y sales ahí y a la primera de cambio le sueltas a alguien hola, ¿tú estudias o trabajas? ¿crees que habría mucha gente que no saliese 🏃🏻?

Buscar trabajo: qué necesitas entender

¿Por qué crees que nos cuesta tanto aprender y por qué ponemos tanta resistencia a aprender en algunas ocasiones? Pues porque cuando nos hacemos adultos, o al menos, cumplimos años nos cuesta todo más y nadie cambia hasta que la situación no se convierte en insoportable. Vamos, que no cambiamos hasta que no nos queda más remedio y ya estamos sufriendo. ¿A cuántas personas conoces que te han dicho yo ahora voy a cobrar el paro y luego si eso me pongo a buscar? o, no encuentro nada y me quedan sólo un par de meses de subsidio, tengo que ponerme las pilas que estoy agobiado.

Aprender nos incomoda y si alguien nos dice que tenemos que aprender a buscar trabajo porque si no, no obtendremos resultados, pues nos toca los c******. Porqué ésto nos saca de nuestra zona de confort, nos manda de un plumazo a una zona desconocida y claro, esto pone en peligro todo nuestro sistema de creencias y las cosas que dan sentido a nuestra vida.

Si yo ya encontré trabajo en su día, ¿por qué iba a tener que aprender a buscarlo ahora?

Entender que hay aprendizajes que nos resultan más fácil incorporar porque van de la mano de nuestros valores y principios es fundamental para entender que hay otros muchos que cambian nuestra forma habitual de actuar, que nos resultan difíciles de afrontar, aunque a veces, no tengamos más opción. Eso sí, si queremos llegar a un resultado, si queremos encontrar curro.

Humildad

Segundo obstáculo, reconocer que ahora nos toca ser meros aprendices, que hay alguien con más autoridad que sabe más que yo y que nos puede enseñar. Porque no nos olvidemos que en otras ocasiones tú ya encontraste trabajo antes y lo hiciste sola.

Y otra vez nos enfrentamos a nuestras creencias: ‘quién eres tú para enseñarme a mi nada’ ‘yo ya sé’ ‘tú no me vas a enseñar nada que yo ya no sepa’. Superar este obstáculo exige mucha humildad. La humildad nos ayuda a tomar consciencia de que hay muchos ámbitos que desconocemos, las cosas cambian, la vida evoluciona, buscar trabajo ahora no es igual que hace ni ocho ni dos años.

Para aprender solo necesitamos tener disposición y apertura

A la mayoría nos cuesta cambiar, esto es algo objetivo.

Nos cuesta reconocer que el cambio nos incomoda, porque lo decíamos antes, requiere de transformación, y eso implica que nos tenemos que mover, acción, por eso, aprender a buscar empleo nos contraria, porque implica, reconocer:

number 1Que no sabemos buscar empleo, porque de otra forma ya lo habríamos encontrado.

number 2Que debemos movernos más y por otros sitios, que tenemos que cambiar nuestra estructura de creencias, nuestros paradigmas, y muchas de las cosas que sostienen nuestro día a día y nuestra forma de actuar y claro, eso escuece.

5 enemigos que te impiden aprender a buscar trabajo

Durante tu camino de (re)aprendizaje hacia la búsqueda de nuevas oportunidades profesionales te vas a encontrar con muchos enemigos, es posible que tú seas el primero de ellos, y otros pueden ser estos otros:

Puedes tener información, pero eso no significa que hayas aprendido

Sí, has leído varios blogs de empleo, has ido a alguna que otra conferencia o taller sobre entrevistas, alguna vez sigues el hashtag #empleo en las redes sociales, pero esto no te faculta como un aprendiz avanzado de este proceso, al igual que el que hayas leído varios artículos sobre una nueva técnica para operar una patología cardíaca, no te convierte en cirujano ni te facilita las competencias para hacerlo. No confundas, información con aprendizaje.

Y otra cosa, si quieres estar informado, elige bien tus fuentes de información porque aquí te vas a encontrar con una infoxicación brutal en este tema y con personas, o debería decir, “vendehúmos” que hablan sin tener los más mínimos conocimientos o experiencia sobre la materia. Para descubrirlos solo tendrás que echar un ojo a su trayectoria profesional y verás que llevan años sin mover el culo de la misma silla.

Autosabotajes, las excusas que nos ponemos a nosotros mismos para no afrontar la realidad

Ya sabes de lo que te hablo, ¿verdad? “Ahora no tengo tiempo, esperaré a que se me acabe la prestación por desempleo para ponerme en acción, ahora mismo quiero disfrutar de esta etapa tranquila, mientras me iré formando y haciendo de vez en cuando cursos, yo es que no necesito que nadie me diga cómo buscar empleo…

Este tipo de autosabotajes nos impiden abordar lo que realmente deberíamos aprender; empezando por saber cómo está el mercado laboral y que exigencias nos demanda ¡que todo ha cambiado mucho con la llegada del 🦠!

¿Obligación o compromiso?

Comprometernos es transformar una promesa en realidad, ahí es nada.

Todos estamos comprometidos con algo, y eso hace que prioricemos unas cosas sobre otras en nuestras vidas. Si nos fijamos en nuestras acciones del día a día, y si ponemos el foco en nuestro lenguaje, en lo que nos decimos y lo que les decimos a los demás sobre nuestra búsqueda de empleo tomaremos consciencia de hasta qué punto estamos comprometidos con esa situación. Por eso, te recomiendo que reflexiones sobre lo que realmente quieres y cómo alinear lo que estás haciendo ahora con aquello que quieres alcanzar, puede sonar demagogo, pero es lo único que funciona, y te lo digo por experiencia propia.

Aprender a comprometerte es tan importante, como adquirir las habilidades para generar y mantener el compromiso con tu objetivo que será “aprender a buscar empleo y encontrarlo”. Y comprometerte es asumir el coste y el esfuerzo que conlleva esa decisión, sin embargo, cuando nos vemos obligados y no comprometidos, nos sentimos forzados a hacer algo que no hemos elegido voluntariamente, algo que nos es impuesto, por el qué dirán otros profesionales o nuestra propia familia o la sociedad en general…

En definitiva, para combatir todos estos enemigos, sólo tenemos que plantearnos estas cuestiones y respondernos de forma honesta:

Dentro de estas circunstancias ¿hay algo que pueda hacer o puedo responsabilizarme de algo?
¿Estoy comprometido o estoy obligado a encontrar una nueva oportunidad profesional?

Tus hábitos

Te lo habrán dicho otras veces, pero es que no hay otra fórmula. Necesitas crear unos hábitos, una rutina. Porque somos humanos y todos tenemos días mejores y días peores, días en los que te quieres comer el mundo y días en los que no tienes ánimos ni pa escuchar tu canción favorita.

De todas formas, te recomiendo que empieces con un plan que puedas cumplir. Ve de menos a más. Empieza por establecer un horario de pocas horas, con unas acciones determinadas y antes de levantarte de tu silla o de tu sofá deja escrito en tu agenda lo que vas a hacer al día siguiente. Y por favor, no te dejes, que me encuentro con gente que está en pijama 24 horas al día, un consejo, vístete y prepárate como si salieras a tu puesto de trabajo cada día.

Autoconomiento

¿Autoconocimiento has dicho? Esa gilipollez con la que a todos se os llena la boca cuando habláis de buscar curro ¿no?

Pues sí, esa gilipollez, que comienza por saber quiénes somos, y qué nos hace diferentes a otros profesionales o cuáles son nuestras áreas de mejora, y terminando por saber cómo mostrar ese talento de una forma atractiva y chula que haga que otros nos tengan en mente por si les surge un problema y necesitan que alguien se lo solucione.

Esa gilipollez, que se va a dar de manera recurrente y por la que te van a preguntar en cualquier entrevista, eso que tienes que tener muy claro porque es lo que te va a permitir diferenciarte del que tienes frente y que amenaza con quedarse el puesto que tú quieres.

Y no, no nos han enseñado a mirar dentro, así que si no puedes hacerlo solo/a pide ayuda: orientadores, coachs, técnicos de empleo y psicólogos te pueden ayudar a ello.

Como te decía unas líneas más arriba, estos pueden ser algunos de los handicaps que te puedes encontrar para llevar a cabo una búsqueda de empleo eficiente, aunque el mayor inconveniente y enemigo siempre estará en ti y en tu reticencia a aprender, así que recuerda,

El gran objetivo del aprendizaje no es el conocimiento si no la acción

Herbert Spencer

 

 

 

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

A %d blogueros les gusta esto: